Esas ganas locas de amar,
esas ganas muertas de resistir.
¿A dónde las vas a dejar?
¿Cuál de las dos vas a guardar?
Que si locura y amor van de la mano,
que si tener ganas y amor no son la misma cosa,
que resistir y amor parecen apuntar a cualquier lado.
¿Cuál vas a elegir? ¿Por qué?
Y pasa que a veces locura, amor, ganas y resistencia
se vuelven una misma cosa, una masa homogénea.
Y ahí quedas, tieso, indefenso y temeroso
pero con unas emociones entremezcladas,
que más que planear dolor,
planean dicha, ansiedad, alegría, brillo en los ojos, suspiros.
Al final no había que elegir nada más que a vos.
Simple.
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